Cada vez que conozco un gran vendedor le pregunto cual es su mejor consejo, recurrentemente me contestan: ¿llevas el registro de tus ventas?, sin embargo cuando tratamos de analizar el comportamiento y resultados de un vendedor, casi siempre nos topamos con información difusa y contradictoria. Esto se debe a que están tan enfocados en lograr resultados que no siguen una rutina de registro de actividades. Al principio parece tedioso y se defienden diciendo que prefieren vender que llenar reportes. Lo que es evidente es que no hacen bien ninguno de los dos.
1. Podemos dar seguimiento a los objetivos: de ventas, de ingreso o de crecimiento. Esto nos ayuda alcanzar bonos de venta o a subir la tabla de ingresos.
2. Tomar un tiempo diario de registro sirve de reflexión para analizar que se hizo bien y hay que mejorar.
3. Nos evita inventarnos actividades para justificar el día de trabajo y enfocarnos en el tiempo que nos es más productivo económicamente hablando.
4. Acota la lista de prospectos, así que nos daremos cuenta de aquellos que nada más nos están haciendo perder el tiempo.
5. Ayuda al seguimiento de segundas y terceras visitas.
6. Deja a la vista en que parte del proceso somos débiles, ya que ahí es donde se registran las caídas drásticas de actividad. También nos evidencia que actividades evitamos hacer por que no nos gustan o por falta de interés.
7. Permite calcular que tan efectivos somos en todo el proceso y comparar resultados de un periodo contra otro.
8. Hace que los pronósticos de ventas sean más realistas y alcanzables.
Recuerda que la bitácora de ventas te ayuda más a ti que a cualquier supervisor. Si no cuentas con una agenda especial de ventas, déjanos tus datos en nuestro e-mail y te anotamos para la edición de 2009.